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    En tiempo caluroso no siempre es fácil dormir, ya que es difícil dormirse, a menudo retrasamos la hora de acostarse, nos despertamos por la noche sudando, y es en la madrugada, cuando hace un poco más de frío, cuando sería agradable dormir, pero suena el despertador.

    Para los niños pequeños el problema también surge, cuando hace mucho calor los bebés suelen estar irritados, de mal humor, sudan mucho y tienen problemas para dormir, es importante saber que antes de los 18 meses el sistema de regulación de la temperatura del bebé no está completamente operativo, por lo que los bebés a menudo tienen una temperatura más alta que los adultos y sudan mucho, especialmente por la noche.

    Refrescar la habitación

    En verano, y especialmente en clima caluroso, es difícil mantener la temperatura por debajo de los 20°C, así que para refrescar la habitación de su hijo, piense en ventilar temprano por la mañana para mantenerla fresca y cerrar las persianas durante el día.

    Si utiliza un ventilador, asegúrese de no dirigirlo directamente a su bebé para no crear una corriente de aire, pero puede colocar una botella de agua helada delante del ventilador en un rincón de la habitación, que enfriará la habitación sin crear un choque térmico en su hijo.

    Si la habitación tiene aire acondicionado, es aconsejable encenderla 2 horas antes de instalar al bebé, para que se duerma en una habitación fresca, pero no dejar el aire acondicionado encendido toda la noche porque seca el aire y las mucosas y puede bloquear la nariz de los niños pequeños.

    Refresca al bebé

    Para bajar la temperatura corporal, piense en bañarse unos grados por debajo de la temperatura corporal, o ponerle una toallita limpia en las piernas y brazos antes de que el bebé se duerma, evite poner a su hijo a dormir en un pañal ya que podría hacer frío por la noche, vístalo con un body de algodón de manga corta o en una bolsa de dormir de Algodón Orgánico que asegure una buena evacuación de la humedad.

    Hidrata al bebé

    Sobre todo, recuerde hidratar a su hijo, ofrézcale beber más a menudo de lo habitual, hágale beber principalmente agua, si todavía bebe biberones de leche, no los caliente, déles a temperatura ambiente.

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