El sueño de los niños es una de las principales preocupaciones de los padres. Está demostrado que la calidad del sueño juega un papel decisivo en la salud, por lo que adoptar buenos hábitos desde pequeños y dormir lo suficiente es una prioridad Pero, ¿cuáles son las necesidades de sueño de los niños según su edad?
Horas de sueño según la edad de los niños
Es evidente que cada individuo es diferente y que las necesidades de sueño no son las mismas de una persona a otra y de un niño a otro. Pero en un periodo medio de 24 horas (noche + siestas) las necesidades son las siguientes:
- Desde el nacimiento hasta los 4 meses: de 16 a 20 horas
- Entre 4 y 12 meses: de 12 a 16 horas
- Entre 1 y 2 años: de 11 a 14 horas
- Entre 3 y 5 años: de 10 a 13 horas
Un niño de 2 años sigue necesitando dormir muchas noches y a veces una o dos horas durante el día, sobre todo si va a la guardería. Asegúrate de que duerman la siesta justo después de la comida, ya que una siesta tardía podría ser perjudicial para que se queden dormidos y duerman toda la noche.
Preparar a los niños para el sueño
Los niños de entre 2 y 3 años suelen ser hiperactivos después de su jornada escolar, por lo que al llegar a casa es importante ayudarles a aliviar la presión orientándoles hacia actividades tranquilas (¡alejadas de las pantallas, por supuesto!) como el dibujo o la lectura.
Crea un entorno tranquilo que induzca al sueño en su habitación: juguetes ordenados, iluminación tenue, ropa de cama agradable y música relajante. Acostúmbrate a pasar un momento de mimos con un peluche y unabonita manta para prepararle para el sueño.
Adapta la hora de acostarse a la duración de la siesta y también a la hora de despertarse y mantén este horario para crear una rutina que permita al niño orientarse, ya que es la única forma de conciliar el sueño.es la incertidumbre la que crea estrés e irritación en el niño, que intentará acostarse más tarde cada día si no eres estricto con el horario
Las consecuencias de la falta de sueño en los niños
Hay que respetar escrupulosamente las horas de sueño de los niños, porque la falta de sueño puede ser dramática, puede provocar irritabilidad, irascibilidad e incluso agresividad. Pero la falta de sueño también puede causar problemas de aprendizaje, de concentración y trastornos psicológicos. Está demostrado que los niños que duermen bien son más capaces de gestionar sus emociones.
La falta de sueño también provoca una reducción del sistema inmunitario, el niño enferma más a menudo, tiene dificultades para recuperarse completamente y recae con regularidad. Por lo tanto, asegúrate de que se cumplan estrictamente las horas de sueño recomendadas y, sobre todo, de que seas regular a la hora de establecer buenos hábitos en tu hijo.
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