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    ¿Sabías que los bebés, hasta los seis meses de edad, no saben respirar por la boca? Esto se debe a que su sistema respiratorio todavía no se ha desarrollado. Es más, el proceso es tan largo que se completa cuando tiene entre 13 y 16 años. Conocer estos detalles es importante para entender qué puedes hacer si tu hijo tiene la nariz taponada al dormir. En este artículo hablaremos de la obstrucción nasal en bebés, un síntoma que a pesar de ser leve puede resultar molesto. 

    ¿Es normal la nariz taponada al dormir en recién nacidos?

    Hasta los dos primeros años de edad, la respiración de los bebés es mayoritariamente nasal. Por eso es importante mantener la nariz despejada para que pueda respirar sin dificultades. Aun así, es normal que en algunos periodos tenga congestión nasal si se dan factores como: 

    • Un catarro o un proceso gripal, así como cualquier infección de las vías respiratorias altas.
    • Cambios de temperatura en la habitación donde duerme. 
    • Que el ambiente esté muy seco, como consecuencia de la calefacción.

    Uno de los síntomas más claros para saber si tu bebé tiene la nariz taponada al dormir son sus alteraciones del sueño. Aunque no se trata de una dolencia grave, puede ser molesto si se repite noche tras noche. La buena noticia es que hay remedios eficaces y sencillos como el lavado nasal. ¿Sabes en qué consiste?

    ¿Cómo hacer un lavado nasal si tu bebé tiene la nariz taponada al dormir?

    El objetivo del lavado nasal es favorecer una buena aireación nasal para poder respirar mejor. Además, también evitarás la acumulación de mocos y otras dolencias como la otitis o la sinusitis.

    Para ello, te recomendamos usar productos naturales como el suero fisiológico o el agua de mar. El suero no es un medicamento así que lo podrás utilizar las veces que sea necesario. Por su parte, las aguas marinas tienen diferentes concentraciones de cloruro sódico. Tras haber sido sometida a procesos de depuración y esterilización, el agua conserva todos sus minerales y oligoelementos para descongestionar la mucosa nasal de forma natural.

    Si quieres hacerlo de forma correcta, te animamos a seguir estos consejos

    • Primero, tumba al bebé de lado sobre el cambiador. Si estuviera boca arriba, el líquido podría deslizar la mucosidad hacia el oído y causar una otitis. 
    • Intenta que esté cómodo y relajado. Antes de empezar el lavado, haz un pequeño masaje o dedícale unos mimos. Es importante que permanezca quieto así que si te resulta complicado, pide ayuda para que otra persona pueda entretenerlo. 
    • Aplica el suero fisiológico en el orificio que está “mirando” hacia al techo. Si no tiene mucha mucosidad, unas gotitas de suero en ambos orificios bastarán. Si tiene más cantidad, necesitarás un chorrito de suero. 
    • En ese momento, expulsará una parte de las secreciones.
    • A continuación, repite los mismos pasos con el otro orificio nasal.

    El mejor momento para hacer lavados nasales es cuando el niño está tranquilo, por ejemplo después del baño o justo antes de acostarse.  Recuerda que puedes repetirlo varias veces al día. 

    Respirar mejor es volver a descansar

    Cuando los bebés están resfriados es recomendable levantar la parte superior del cuerpo. Ahora bien, no se trata de usar una almohada o una toalla enrollada debajo del colchón. En estos casos el mejor aliado es una almohada de cuña ya que ha sido diseñado especialmente para la comodidad y seguridad de los niños. 

    Superficie reclinable para cunas y cochecitos de bebé con funda de Aloe Vera
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    Almohada Inclinada en forma de cuña

    Con este accesorio, la parte superior del cuerpo se inclina unos 15°, lo suficiente para conseguir una mejor respiración en caso de resfriado y limitar la regurgitación después de tomar el biberón. 

    Además, todos nuestros planos inclinados son de TENCEL™ o de viscosa de bambú, materiales naturalmente antibacterianos que no requieren ningún tratamiento químico. 

    Si elegir una buena cuna o colchón es importante, lo mismo ocurre con un plano inclinado. Y es que aunque no lo utilices cada noche, es mejor contar con uno de ellos en casa y saber que siempre estará ahí para cuando tu bebé lo necesite.

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