Durante las vacaciones es una fiesta, hay sol, hace calor, aperitivos, barbacoas con la familia o los amigos, nos vamos a la cama más tarde.... Los niños también disfrutan de esta emoción y, sea cual sea su edad, tienen dificultades para ir a la cama y tienen dificultades para dormirse... Pero cuando empiezan las clases, tendremos que aplazar a todos!
Durante las vacaciones se cambia el ritmo, no hay reloj, se come cuando se tiene hambre, se duerme cuando se quiere dormir sin preocuparse de la hora, pero al principio del año escolar se termina, los niños y los adultos tienen que respetar las limitaciones y los horarios, para los más pequeños que están haciendo su primer comienzo en el jardín de infancia, también será necesario acostumbrarse a un nuevo lugar: la escuela, también tendrán que escuchar al maestro y conocer a muchos otros niños, una verdadera perturbación que puede ser en el aula.
Para preparar al niño para el sueño, es necesario favorecer las actividades tranquilas, sin televisión u otras pantallas, sin actividades deportivas justo antes de irse a dormir, un baño para relajarse, una comida familiar (¡en paz!) y la lectura de una bella historia, no olvide que el famoso y famoso ritual de acostarsecon un peluche es muy importante.
Para los más reacios que no quieren quedarse en la cama, que llaman o lloran, ¡no se rindan! ¡Ve a ver qué está pasando para asegurarse de que todo está bien, pero explícale al niño que es hora de dormir, que necesita dormir para crecer bien y estar en forma al día siguiente!
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